¡Aquí estoy! He vuelto para tocar la moral un rato escribir una entrada.
Hoy es el día D. ¿Y por qué el día D? Pues por la misma razón que el otro día era el día X, porque me sale a mí de la Varita de Saúco y punto. No, en realidad es ese día porque es el día de la histeria materna. Y como no le he dado el suficiente énfasis, HISTERIA MATERNA.
Estamos haciendo las maletas para fugarnos a Londres, y mi madre va de aquí para allá murmurando gritando a los cuatro vientos "¿Estíbalizhasmetidoelpijama? Quelaotravezseteolvidó" (true story, cuando me fui de campamento a Salamanca se me olvidó meterme el pijama en la maleta), "Estíbalizmetelodelaslentillas", "Estíbalizdequéquiereselbocadillo" y cosas por el estilo. El caso es que ya tengo la maleta a reventar y ya no me cabe NADA más. Lo último que tengo que meter es la cámara de fotos, y como es una réflex la muy puta, apenas entra. Vamos, yo sigo rezando para que entre en la maleta.
Luego estoy suuuuuuper animaaaadaaaaaa (ironía, por si se os ha atrofiado la antenilla detecta-ironías con tantas vacaciones) con lo de las revueltas, pero bueno, sigo pensando que no me van a matar ni nada (??????)
A ver, recapitulemos, soy Lord Voldemort, bitch please. Me sobran huevos para viajar a Londres en un unicornio montado sobre una Saeta de Fuego, plantarme delante de los que arman los disturbios, y si no salen perdiendo culo con mi siniestra presencia, les lanzo un Avada Kedavra y sobra.
Voy a dormir en un aeropuerto esta noche. Voy a dormir en un aeropuerto esta noche. Voyadormirenunaeropuertoestanoche. Sólo intento concienciarme, es complicado. Serán mis inicios como vagabunda, luego me meteré en las drogas para superarlo, las dejaré, me echaré al campo y ya conocéis el resto de la historia.
Más que nada, rezad por que me encuentre a Josh Fransexy Franceschi en Londres, porque me parece que es el único que está por esos lares. Aunque también estaría bien encontrarme a Ruperto Grint o Tom Felton. El pecosillo y compañía están por ahí durmiendo la mona haciendo fiestas sólo para páyoners pioneers y su novia la rubia caracerdo se ha ido de la Sevilla city, el gangsta, el que te planta cara por los disturbios. Ay, qué ganas de tocarme las pelotas.
Antes de que me encontréis descargando mi ira contra el Ares, que no se digna a funcionar, me despido de vosotros, que os lo paséis bien mientras yo me dejo la paga en discos, pósters, camisetas y unas Vans, jopéééé, yo quiero otras. Adiós, mortífagos, espero volver sana y salva.

L. Voldemort

PD: Lyrics by Tito MC, uno de mis ídolos musicales de todos los tiempos. El que te focka, el que te parte la boca, el que no se deja tocarse las pelotas, PUTAH.

Aquí vuelvo, sé que me echáis de menos HAHAHAHAHANO. Resulta que después de toda la agonía de la entrada anterior, salió la pregunta un ratito más tarde, abrí mi querido libro, contesté la pregunta y me registré con un nombre que parece un título de la saga Crepúsculo, muy a mi pesar. Para todos los curiosos, me llamo StrikeDawn54. NO ME DIGÁIS QUE NO PARECE ECLIPSE 2, LA VENGANZA DE LA PASTELOSIDAD. Cambiemos de tema, por favor, que me pongo mala y brillo cuando me ponen al sol.
Al final, la comida con mis padres no fue tan horrible, porque me llevé de paquete a mi mejor amiga. Comimos en el pantano, y yo la verdad no me metía al agua desde que tenía uso de razón por eso de que daba todo el asco, había peces repugnantes y profundidad no conocida, y al final me metí. Cabe decir también que pasamos un ameno rato riéndonos de la gente, tanto de Neville Longbottom, Pansy Parkinson, Lavender Brown y sus amigos inútiles Jigglypuffs Hufflepuffs, de Frodo de la Comarca y compañía, Jesucristo Superstar y demás (soy una persona dada a sacar apodos a la gente).
Ayer mismo, volvió Félix de su apasionante viaje a Salou, estuvimos un rato con él, me convenció para montarme con él en el Huracán Cóndor aún a riesgo de morir antes de ser mayor de edad y nos bebimos una Fanta porque estamos tó locos y vivimos on the limit.
Tras hablar de cosas random como suelo hacer, ahora me toca momento de motivación máxima elevada a la quincuagésima primera potencia: ¡Me quedan 3 días para ir a Londres! *Se pone a dar vueltas emocionada on fire saltando cual Heidi* Sí, joé, que yo quiero a Londres más que a muchas algunas personas que conozco. De hecho, estoy feliz porque quiero encontrarme a gente guay; Por ejemplo, hoy he soñado que me encontraba a Daniel Radcliffe (podéis llamarme atrevida si queréis), otros días sueño que me encuentro a la cosa más preciosa creada por el ser humano, también conocida comúnmente como Danny Jones. Soy tan fangirl que me asusto. En esa maravillosa ciudad me voy a dejar los ahorros para el asilo de mis padres de toda una década, mayormente en discos, ropa, zapatillas, pósters, cosas HarryPotterianas y demás.
Después de daros envidia contaros mi fantástica vida, de escucharme Three Cheers For Sweet Revenge y The Black Parade de pé a pá (hacía 5487481516789 años que no los escuchaba), de limpiar mi cuarto y todo el copón de la baraja, me iré haciendo mutis por el foro porque estoy muriendo de hambre y necesito alimento. Volveré, aunque no sé si antes de ir a Londres o después.

L. Voldemort

Os preguntaréis qué hago tocando las narices tan pronto. Os contaré la historia desde el principio.
Resulta que ayer, por segundo día consecutivo, me metí en Pottermore. Y adivinad qué, estaba cerrado. OTRA VEZ. Entonces, como soy Voldemort una tía guay me he puesto hoy el despertador a las 9, porque supuestamente abrían la página a esa hora. Me ha sonado el despertador y me he levantado, acordándome de todos los familiares y amigos de JK Trolling Rowling, he bajado las escaleras cual niña del exorcista (a poco me pongo a hacer el puente mientras bajaba), y me he postrado frente al ordenador con las gafas de empollona puestas, los ojos entrecerrados y una melena digna de Hagrid tras una noche de sexo salvaje y desenfrenado. Entonces, al abrir la página me he encontrado que el registro estaba cerrado. El alivio ha recorrido mi cuerpo serrano al leer que era el del día dos, y que aún no habían abierto. Creo que ese ha sido el justo momento en el que los malos sentimientos me han invadido, me han llegado una oleada de ganas de quemar la casa de esa cruel mujer, degollarla y beberme sus jugos gástricos a palo seco. Otra hora más, y aquí sigo, esperando a que la abran. Vamos, que tendré que estar aquí por los siglos de los siglos amén, hasta el fin de los tiempos, el día del juicio final,  me nacerá una barba sólo comparable a la de Dumbledore, ese hombre que me cae tan jodidamente mal aunque todos le adoráis, y mis hijitos pelirrojos y pecosos Weasley Jones me llevarán al asilo, y aún no me habré registrado en Pottermore.
Supongo que tendré que ir a practicar mi Avada Kedavra por si me encuentro a JK por Londres. Y eso es todo lo que haré hasta que den las 11, cuando vuelva a recargar por millonésima vez la página a ver si la abren.
Si hoy no me registro, rodarán cabezas. Sirius-ly.

L. Voldemort

PD: Oyyy, qué mona mi Lexi DeLonge, que me menciona en una entrada de su blog... You're the voice inzide moi yeaaaaaaaaad!